domingo, 21 de agosto de 2016

                          



                           ¿Y USTEDES NO QUERIAN PATRIA?


El término Patria viene del latín “patrïa” –familia ó clan-; ó “patris” – tierra paterna- y designa la tierra natal ó adoptiva a la cual nos unen lazos afectivos, culturales o históricos. Tan simple y a la vez tan profundo como eso es Patria. Es sólo cuando el término se carga de significados políticos o ideológicos  que la “palabra” Patria se convierte en objeto de todo tipo de interpretaciones con fines proseletistas.


Creo que eso es lo que viene pasando en Venezuela con el término Patria.


Por un lado los “oficialistas” (¿Chavistas Maduristas?) se atribuyen el haberla rescatado de la tumba del olvido donde la enterró, según ellos,  la cuarta República a fuerza de oligarquía y capitalismo. Ellos, los oficialistas,  son entonces por derecho los incuestionables dueños de la Patria, los únicos que pueden vociferarla hasta el cansancio especialmente con el corrillo popularizado por el comandante eterno; es tanta la obsesión oficialista con el término que recientemente escuché a un muy “neutral” analista político de muy marcado sesgo oficialista declarar que la oposición ahora hablaba de Patria porque le convenía cuando se han burlado del término patria rescatado en Venezuela gracias a los oficialistas. La verdad creo que más que burlas han sido críticas a los excesos y parodias en que han  caído los oficialistas con la expresión Patria. 


Del otro lado, es decir del lado de “la oposición”, muchos han cometido el error de asociar Patria con “oficialismo ó revolución”, al punto que como respuesta a quienes se quejan de la crisis económica, política y social que vivimos en Venezuela suelen responder con ironía ¿Y ustedes no querían Patria?; ó ante comentarios por las carencias materiales que son muchas por estos días suelen remedar la frase del comandante eterno:  “Pero tenemos Patria”, tomada por cierto o quizás pura coincidencia histórica de la novela “El Coronel no tiene quien le escriba” de Gabriel García Márquez.


En mi opinión en los últimos años se ha abusado del término Patria bien porque se le ha vaciado de vivencias reales, profundas y concretas  al usarla unos como bandera ideológica hasta convertirla en “palabra sensiblera”, y otros como palabra-castigo que debe ser cambiada junto con esa novelería que se vendió como revolución.


En lo personal para mi Patria no es un concepto, un término, una expresión; no es tampoco las clases aquellas de la escuela primaria donde debíamos enlistar a los Realistas y a los Patriotas como parte de nuestro estudio de la Historia de Venezuela empeñados en el maniqueísmo de “los malos y los buenos” – ¿se repite la forma de ver la historia?-; y mucho menos el estribillo “Patria, patria, patria querida…” que tanto me recuerda la ingenua oración infantil que dice “Jesusito de mi vida eres niño como yo por eso te quiero tanto y te doy mi  corazón tómalo tuyo es mío no”, dicho de memoria de manera mecánica y complaciente.


A razón de una conversación acerca de las “causalidades y las casualidades” que nos han traído a lo que es hoy Venezuela, y como reacción a mi punto de vista, fui víctima de esa odiosa respuesta de “¿Y ustedes no querían Patria?”. Confieso que esa frase tantas veces oída esta vez hizo mella en mí, y me llevó a reflexionar.


No se puede pretender que en las elecciones de 1999 lo que se quería era Patria, por cuanto siempre ha estado ahí, siempre ha existido; con lo cual también respondo a los oficialistas que se “adjudican la reivindicación del término”, casi que su invención.


Mi Patria Venezuela es este orgullo de saberme venezolana, pese a las circunstancias históricas que vivimos actualmente; es saber que mi Patria Venezuela es algo más que un Gobierno, unos Gobernantes y mucho menos unos políticos. Mi Patria Venezuela es imaginar a los abuelos maternos llegando de las Islas Canarias y mirar esperanzados la tierra venezolana; son las costas de Aragua cobijando mis ancestros en las haciendas de cacao de Chuao y Cuyagua. Esta mi Patria Venezuela es la convicción de estar en una tierra maravillosa con gente buena y talentosa. Esta mi Patria Venezuela es también esa Patria viajera multiplicada por el mundo en el corazón de hijos, sobrinos, familiares y amigos…Esta es la Patria Venezuela en la que yo creo.

sábado, 13 de agosto de 2016

                           EL ANTIPASTO DEL AQUILES



                                  ANTIPASTO:Plato frío compuesto de fiambres acompañados por verduras que   se sirve como primer plato o entrada, antes del plato principal.

 

 

 


El Antipasto del Aquiles debe su nombre a que la receta me la dió la querida maestra Morelba,  de la "comandita" de nuestra querida Escuela Aquiles Nazoa, donde además de estudiar vivieron  mis hijos maravillosas aventuras creativas. De esa época muchos son los recuerdos, y muchos los amigos....... Pero hablemos del antipasto.


Decía que su nombre se debe a que la receta me la dió la querida maestra Morelba, pero además, porque en los paseos con los grupos de compañeros del Aquiles tanto de Mayrim,  mi hija, como de Eduardo Diego,  mi hijo, no podía faltar el famoso antipasto, que por sus cualidades de sabroso, versátil y rendidor era muy bien recibido por grandes y chicos, adaptándose perfectamente a las salidas al Parque o a las estadias de fin de semana en la casa de Playa de la Boca del Tocuyo.


Hacía mucho tiempo  no repetía la hazaña del tan celebrado "Antipasto del Aquiles", pero recientemente  le llegó el turno de remozarlo en ocasión de la Boda de mi Hijo Eduardo Diego donde por razones "obvias" el afamado antipasto
formó parte de las recetas seleccionadas para tan importante acontecimiento.

Y de nuevo el "Antipasto del Aquiles" volvió a levantar pasiones y deleitar paladares pese a sus ingredientes si se quiere bastante básicos. En esta ocasión el más deleitado fue mi hermano Guillermo Castillo, de paladar sobreexigente, dado como es a la buena mesa y al hobby de la cocina. De hecho perdí la cuenta  las veces que
durante el festejo Guillermo me preguntó por la receta del "Antipasto del Aquiles", que para satisfacción de la chef, es decir yo, se "vendió todito".

Aquí va la receta del tan celebrado plato, dedicado especialmente a mi hermano Guillermo Castillo.

INGREDIENTES

2 tazas de zanahoria picadas en juliana
2 tazas de coliflor picados finos (sin deshacer)
2 tazas de vainitas picadas en juliana
2 tazas de pimentón (rojo y verde) picado en juliana
1 taza de cebolla picada en tiras muy finas
1 taza de salsa inglesa
1 taza de salsa de tomate ketchup
1 taza de mostaza (si lo quiere menos fuerte 1/2 taza)
1 taza de salsa heinz 57

1/4 de taza de aceite
2 tazas de pollo ó atún fresco (alternativo) sancochado
1 taza de vinagre

PREPARACIÓN
Prepara debidamente picado como te indiqué la zanahoria, el coliflor, las vainitas, el pimentón y la cebolla. En una olla grande pon a hervir aproximadamente 1 litro de agua ; agregale sal al gusto y la taza de vinagre. Mete los vegetales en el agua hirviendo (1 x vez) calculando 4 a 5 minutos para cada uno cuidando que te queden al dente  y siguiendo el orden en que te coloqué los ingredientes. Finaliza sumergiendo la cebolla.Reserva el agua donde cocinaste los vegetales. En un caldero grueso y grande (calcula un tamaño proporcional a la cantidad total de ingredientes) echa la salsa de tomate, la salsa Heinz 57, la mostaza, la salsa inglesa y el aceite. Llevalo a hervor. Agregale los vegetales previamente sancochados al dente y dejalos cocinarse por más ó menos 10 minutos. Si deseas que la preparación te quede más diluida agregale a tu gusto el agua donde herviste los vegetales. Finaliza agregando el pollo ó atún (según tu opción) mezclando con cuidado para que no se deshagan, preferiblemente con cucharon de madera. Deja cocinar por 5 minutos más y retira del fuego. Deja reposar y guardalo en la nevera.
Acompañalo con galletas, casabe, pan árabe. Puedes tambien ser creativo y usarlo como "topping" para una pizza, como salsa para pastas o para preparar brochetas.

                                                           !Buen provecho!

                                                       ALMOJABANAS


(Almojábana:  La almojábana o almojábano es un preparado dulce típico de la cocina de algunos países de América Latina. Su nombre deriva del árabe al-muyabbana, que podría traducirse como "la quesada" o "la que tiene queso".

                                                    http://es.wikipedia.org/wiki/Almojábana_(Latinoamérica)

 

Las almojabanas me traen recuerdos a sabrosos viajes familiares por los andes nuestros, y un poquito más allá,  a las anheladas visitas a la casa materna en Cúcuta, aquella Cúcuta de hace muchos, muchos años, donde mi mamá tuvo una larga estadía, tan larga, que fue el tiempo suficiente para parir dos muchachos, mis hermanos menores: Milagros y Fidias. 
Del ultimo viaje familiar a Táchira,  hace dos años, no sólo nos trajimos el rico sabor de las almojabanas en nuestras bocas sino una deliciosa receta que Eduardo, mi amado esposo, ha ido dándole fisionomía propia hasta convertirlas en las "Super Almojabanas"
Te invito a preparar esta delicia, te aseguro quedarás infinitamente agradecido.

INGREDIENTES
1/4 kg. de Harina de Maíz
1/2 Kg. queso blanco duro ó semiduro
60 Grs. de maicena
5 Grs. polvo de hornear
2 huevos
30 Grs. de mantequilla
1 pizca de sal
Leche (+ ó - 1 taza)

PREPARACIÓN
1.- Procesar el queso con la maicena
2.- Cernir la harina con el polvo de hornear
3.- Cremar la mantequilla junto a la azúcar y los huevos
4.- Agregar a la crema de mantequilla, poco a poco, la harina, la maicena mezclada con el queso y la leche. Esta ultima según lo vaya pidiendo la masa.
5.- Hornear a 320°C por 15 minutos aproximado.

NOTAS:
1.- La preparación se hace usando la batidora
2.- El queso y la maicena se mezclan en el procesador electrico cuidando que el queso no quede muy fino.
                                    !Buen provecho!
PAN CASERO

Hacer pan es una experiencia maravillosa...casi mágica. Ver como de esos ingredientes dispersos y desunidos  sale ese producto compacto e íntegro donde se han mezclado los elementos para dar vida a algo nuevo: el pan. Pan que sale de tus manos para deleite de todos en casa. En esto de hacer pan en casa, además, hay como una feria donde se exhiben los sentidos: olor, sabor, color, textura, consistencia...Olor a levadura, olor a pan horneado. Todo se impregna de manera asombrosa.
Muchas Recetas de Pan hemos hecho mi amado esposo Eduardo y Yo; unas recetas probadas con cierta timidez, que las hacemos solo una vez y ya más nunca. O la famosa receta de Pan de Jamón que tiene su lugar una vez al año, o esas recetas que de tanto hacerlas se hacen nuestras y parte de nuestras rutinas.
La receta de Pan Casero que hoy les presento tiene esta última característica: por fácil, por cómoda, por versátil  y sabrosa
Aquí se las dejo esta receta que en casa la hacemos por lo menos una vez a la semana.

INGREDIENTES
1/2 Kg. de harina todo uso
1 y 1/2 de taza de agua
2 cdas. de aceite
1 y 1/2 cucharada de levadura en polvo
1 cda. de azúcar
1 cda. de sal
1 cda. de orégano/comino/anis (Opcional c/u)

PROCEDIMIENTO
Mezclar todos los ingredientes en el vaso de la batidora con el gancho hasta que se forme un bollo que se despegue "solo" de los costados y del fondo. Se saca del vaso y se amasa por 4 ó 5 minutos. Se coloca en un envase o bolsa impregnada de aceite. Si es en en un envase colocar encima un paño para que no se seque la superficie. Se deja levar hasta duplicar el volumen (+ ó - 30 minutos)
Poner a precalentar el horno a 400°C. Colocar la rejilla donde se van a hornear los panes y una bandeja un poco honda debajo en otra rejilla.
Poner la masa en la mesa o tabla de trabajo. Desgasificar con la punta de los dedos. Dar forma rectangular (25 x 15 cms. aprox.) Dividir a lo largo. Dar forma a los panes (redondo o alargado) Colocar un papel de aluminio sobre una tabla de picar y colocar ahí los panes. Deslizar los panes junto con el papel de aluminio sobre la rejilla que tenemos en el horno. Inmediatamente colocaremos dos vasos de agua en la bandeja que está debajo de la rejilla Apagamos el horno por 10 minutos. Lo volvemos a prender a 400°C por + ó - 30 minutos. Volteamos los panes para que se doren un poco por debajo (+ ó - 5 minutos)

Si se desea antes de meter los panes en el horno le hacemos unos cortes no muy profundos con un cuchillo afilado. Pintamos con agua o leche y le empolvoreamos con ajonjolí

!Buen Provecho!