miércoles, 12 de octubre de 2016

CAMBIANDO TUS HÁBITOS CON UNA ESTRELLA DE MAR


Decidir  iniciar un Proyecto  de Cambio Personal toca y trastoca nuestro SER, nuestro HACER y nuestro TENER. 

Hablándonos de un principio de cambio Einstein nos dijo: “Si quieres algo distinto no hagas siempre lo mismo”. Sin embargo, todos en nuestro intento de cambio tropezamos con el mayor de los HÁBITOS, el HÁBITO DE LA COSTUMBRE.


Un hábito es el resultado de una acción que se repite de manera “inconsciente” convirtiéndose en algo automático e involuntario. A diferencia de esas “cosas nuevas” que intentamos  lograr, un hábito, una vez instalado, no requiere motivación, esfuerzo ni voluntad. Es nuestra zona de confort. 

 
Nuestra forma de SER es el resultado en un 45% de la suma de nuestros hábitos, de ahí su importancia. Nuestras metas, nuestros deseos, nuestros propósitos, nuestro Proyecto de Cambio Personal,  pueden  ser posibles ó “imposibles” de alcanzar según no los permitan nuestros hábitos. 


Todos  hemos vivido la experiencia de querer cambiar un hábito y “morir en el intento”. Desde algo tan sencillo como “no morderme las uñas”, hasta algo más complejo como “mantener al día mi blogs y redes sociales”. Sin embargo,  la buena noticia es que si fueron adquiridos, aprendidos, pueden ser cambiados, es decir, “desaprendidos”  instalando en su lugar nuevos hábitos según lo demande nuestro Proyecto de Cambio Personal.   


Te resultará más fácil desaprender o desinstalar los hábitos no deseados y colocar en su lugar hábitos más acordes a tus nuevos propósitos, si conoces cómo funciona el mecanismo de los hábitos. 


Para que un hábito se instale y automatice se requiere de VOLUNTAD para iniciar la acción y de REPETICIÓN continua y constante que sobrepase  la “curva de aprendizaje” de por lo menos treinta dias. A su vez la VOLUNTAD y la REPETICIÓN necesitarán dos ingredientes de apoyo: Un RECORDATORIO que actúe como señal o alarma y una RECOMPENSA que nos motive para repetir  la acción.



Lo anterior es la regla de las 3R: RECORDATORIO/REPETICIÓN/RECOMPENSA que funciona como un circuito automático que se graba en nuestro cerebro (Ganglio Basal) permitiendo liberar de trabajo  a otra área importantísima de nuestro cerebro, el Cortex Prefontal, que podrá ocuparse de decisiones propias del pensamiento  consciente  ante  acciones novedosas y complejas.



Ahora que sabes cómo funciona este maravilloso  mecanismo  de los hábitos tienes en tus manos la posibilidad de decidir - con tu Cortex Prefrontal-  qué hábitos convienen a tus nuevos propósitos y cuáles son un estorbo o no aportan mucho a tus planes de cambio. Lo interesante de este mecanismo es que funciona en base a una ley de subsidiaridad, es decir, los nuevos hábitos a medida que se van repitiendo ocuparan poco a poco el espacio de los viejos hábitos hasta debilitarlos y en algunos casos hasta hacerlos desaparecer por completo. Y lo más interesante,  en solo 30 días continuos podrás lograr este cambio deseado.


Por cierto, existe una herramienta usada como Retrospectiva en  “Proyectos Agiles” conocida como Estrella de Mar. Aunque creada para Proyectos Tecnológicos y de Trabajo en Equipo, puede ser aplicada  a  proyectos de cambio personal.


¿En qué consiste la Estrella de Mar?
Se basa en usar un diagrama con forma de estrella de mar que permite reconocer cinco áreas vitales en relación a tus hábitos o prácticas en función de tu proyecto de cambio personal, evitando así centrarte solo en la dicotomía de ELIMINAR UN VIEJO HÁBITO ó CREAR  UN NUEVO HÁBITO.



1.    Comenzar a hacer: Que nuevas prácticas, rutinas ó comportamientos debes iniciar que te ayuden en tu nuevo propósito o proyecto personal.


2.    Más de: Aquellas prácticas, rutinas ó comportamientos que forman parte de ti y resultan útiles y positivos a tu nuevo propósito o proyecto personal y por tanto debes incrementarlas.


3.    Seguir haciendo: Prácticas, rutinas o comportamientos que te aportan valor y conviene seguirlas haciendo en la misma frecuencia e intensidad.


4.    Menos de: Son aquellas prácticas, rutinas ó comportamientos que forman parte de ti y aunque no perjudican tu proyecto actual te restan energías para iniciar nuevos hábitos. Si resulta necesario puedes pensar en abandonarlas.


5.    Dejar de hacer: Referido a aquellas prácticas, rutinas ó comportamientos que forman parte de ti pero definitivamente no son útiles e incluso perjudican tu deseo de cambio a favor de tu proyecto personal.


Teniendo en mente tu META DE CAMBIO PERSONAL te invito a revisar tú día a día, explorar tus hábitos y aplicarles la estrella de mar. Recuerda que un hábito no es sólo un evento externo o público (Ej “Tomar mucho refresco”) sino también son eventos internos o privados (Ej. Nuestras creencias o Pensamientos Negativos)
En otro momento compartiré contigo un método de 6 pasos para activar tu mecanismo de CAMBIO DE HÁBITO los cuales te permitirán abordar  las puntas 1 y 5 de tu estrella de mar.


Miriam Castillo P.
Coach de Vida y Teraputa Transaccional
@miriamcasper 
@mcp_org